Informamos a los lectores de que en mi
cabeza ciertas palabras carecen de significado por lo cual se
procederá a su eliminación. Uno de estos ejemplos es el conocido
sustantivo “suerte” ya que éste no existe. Nada se consigue por
suerte, nada ocurre por suerte tampoco; cuando tienes una meta grande
y la llevas a cabo la gente que te rodea suele comentar la “buena
suerte” que tienes pero se equivocan porque tú no tienes buena
suerte, trabajaste y te esforzaste por conseguir aquello y aunque
ahora pueda parecer fruto del azar que te sonríe echa la vista atrás
y recuerda si ganaste o no aquella “potra”. Otra de las
tendencias de esta palabra es ser usada en oraciones como: Tienes
suerte de conocer a... o tuviste suerte al encontrarte con... y de
más ejemplos en los que aparentemente no realizaste ninguna
influencia, en los que puede parecer que no influiste, pero voy a
contarte un secreto: todo el mundo tiene lo que se merece.
Así que esfuérzate en todo lo que
hagas, consigue más de lo que te propongas, agradece lo que posees
y... ¿Buena suerte?
Dania García-Donas Márquez |
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